Ay, Maia... ¿No será mucho?

Un texto a propósito de nuestra Tutoría de Escritura. Lo subo agradecida y con una mezcla de orgullo y pudor.

Con perspicacia de palabras deslizó:

- Lo que vos querés es una especie de tutoría.

- ¡Eso es lo que quiero!- respondí contenta. Temía que Claudia no estuviera disponible.Acordamos nuestro horario quincenal. Comencé a exhumar textos.

Llegó la hora de nuestro primer encuentro...

No sé cómo lo hace, pero tiene un don para ver lo que atenta contra cualquier texto que se le ponga enfrente. Más allá de su formación académica, ejerce la potestad de intervenir como cirujana profesional sobre palabras, oraciones, párrafos y textos, cualquiera sea el género. Extirpa con sobrada maestría lo que no le sirve al enunciado ni al que escribe, o lo que confunda o aleje al lector.

No lo hace de manera invasiva como una cirugía habitual, sino a través de una indagatoria vivaz en cada encuentro.

Así, quien escribe da forma y luz a un texto con coherencia y fidelidad al potencial receptor.

Desde que comenzamos hasta ahora han transcurrido cuatro meses. Cada reunión es un viaje del que quedo con jet lag por unas horas. En el proceso, aún sigo aprendiendo el refinado arte de expresar lo que quiero decir por escrito, sin espantar a quien llegue a leerme.

Digo GRATITUD por haber encontrado a Claudia Maiocchi en mi universo caótico de palabras.

Maia Callis Tutoría Personalizada de Escritura